El jardín propio o las zonas verdes de la sede de una empresa son idóneos para crear pequeños biotopos para plantas y animales. En relación con el proyecto "Arteria vital Rin Superior: biodiversidad en ambientes húmedos y secos", Werner & Mertz ha aplicado diversas medidas junto con NABU para aumentar la biodiversidad en su recinto empresarial.
Entre estas medidas se incluyen:
la instalación de tres hoteles de abejas silvestres,
la modificación del régimen de recorte de vegetación en el área del aparcamiento MA y determinadas zonas verdes,
la plantación de rosas silvestres,
el cultivo de plantas poco comunes a partir de plántulas del vivero de NABU,
la señalización de las medidas y
la colocación de bloques de nido de abejas silvestres.
Las demás zonas con flores de la sede de Mainz se han desarrollado muy bien según las observaciones realizadas en 2019.
El diseño del reciclaje tiene en cuenta el reciclaje de un producto desde el inicio. Estas son las características más importantes de los envases optimizados según el diseño del reciclaje.
Los componentes se pueden separar (como el tapón de la botella).
En la medida de lo posible los materiales son claros o transparentes.
Se pueden retirar fácilmente las etiquetas.
El envase está compuesto por un solo material (monomaterial).
Para cada producto se decide ya desde el principio si y en qué medida se puede recuperar tras su uso. La forma, la pureza de los materiales, el tipo de uniones (tornillos, a presión, adhesivo, etc.), el etiquetado y otros detalles influyen decisivamente en su reciclabilidad. En general, cuanto más complejo sea un envase más costoso será sureciclaje.
Los productos usados compuestos por una gran mezcla de materiales, de diferentes tipos de plástico que no se pueden separar, en los que se han soldado los cierres u otras piezas similares o de los que no se pueden retirar las etiquetas, no se pueden recuperar. Por esta razón, la Iniciativa de Reciclaje de Werner & Mertz obliga al desarrollo de diseños reciclables para los materiales de envases y los envases de productos.
Por desgracia, pocas empresas diseñan sus envases según el principio de diseño para reciclaje. Pero solo así podremos reciclar el plástico con resultados óptimos y conservarlo durante mucho tiempo en el circuito. De este modo, no hace falta recurrir a combustibles fósiles ni consumir petróleo.
La sede central de Werner & Mertz, inaugurada en 2010 en la avenida Rheinallee de Mainz, Alemania, se ha convertido en todo un icono arquitectónico. Con sus llamativos aerogeneradores instalados en cubierta, este edificio cumple los estándares de arquitectura sostenible más exigentes del mundo en la actualidad. En 2012 obtuvo la certificación de sostenibilidad LEED en la máxima categoría, la Platinum, convirtiéndose en la primera sede industrial de Alemania en obtener la máxima puntuación LEED.
Las siglas LEED significan "Leadership in Environmental & Energy Design", una distinción que se otorga en diferentes categorías a edificios ecológicos de gran calidad arquitectónica. El sistema de certificación LEED fue desarrollado en Estados Unidos por la organización sin ánimo de lucro USGBC (U.S. Green Building Council).
Entre muchas otras cualidades, este edificio destaca por su concepto energético. Por medio de energía eólica, energía fotovoltaica y energía geotérmica, la nueva sede genera un 20 % más de energía de la que necesita para su funcionamiento ordinario. Asimismo, dos Smarts eléctricos utilizados como coches de empresa se recargan gracias a la energía solar de la cubierta de la sede.
El sistema de calefacción y refrigeración se alimenta con agua de un pozo propio, que luego se desaliniza y se reutiliza en la producción con el consiguiente ahorro de agua. La nueva sede recibió el distinguido premio medioambiental de Renania- Palatinado en junio de 2010 incluso antes de su inauguración oficial. El edificio es otra demostración de que Werner & Mertz considera la sostenibilidad un principio rector de su filosofía.
Desde hace casi 20 años Werner & Mertz cuenta con una gestión medioambiental integral con el objetivo de ahorrar materias primas, respetar el medio ambiente, optimizar el uso de los recursos y reducir los costes. Un auditor independiente de EMAS valida nuestro sistema de gestión y nuestros avances en la protección de los recursos naturales de forma periódica desde 2003.
EMAS (Eco-Management and Audit-Scheme) de la Unión Europea combina gestión y auditoría medioambiental. Pueden someterse a sus auditorías todas las empresas, administraciones y asociaciones que deseen mejorar su rendimiento medioambiental, al margen de su tamaño y el sector en que operen.
Las organizaciones EMAS son supervisadas independientemente por auditores medioambientales que cuentan con homologación estatal. Las auditorías son voluntarias y las financian las propias entidades. EMAS está considerado, a fecha de hoy, el sistema de gestión medioambiental más exigente y de mayor calidad que existe en el mercado.
¿Por qué la certificación EMAS es especial?
Las empresas responsables sostenibles como Werner & Mertz utilizan estas herramientas de forma intensiva. Fomentan modelos de economía sostenible, si bien no pueden aprovechar el prestigio de EMAS debido a las restricciones de la UE.
Dado que EMAS es una certificación que se aplica a un solo centro de producción, la Comisión Europea prohíbe utilizar su logotipo en productos y envases, ya que los productos no siempre se fabrican en un solo centro. Esta prohibición también se aplica a empresas como Werner & Mertz, que cuenta con una certificación completa de EMAS.
Precisamente en una época de grandes inquietudes por parte de los consumidores consideramos necesario informar mejor a la opinión pública acerca de los productos y los procesos de producción. Por ello apostamos por dar a conocer EMAS como un sello de una cadena de creación de valor sostenible por lo que respecta a la producción y los productos.
Con la construcción del nuevo centro de producción de 2019 se creó la mayor planta de reciclaje de botellas del mundo. La superficie de 4.000 metros cuadrados de la cubierta está ocupada en dos terceras partes por 455 placas fotovoltaicas. Para la calefacción del edificio se utiliza, entre otros, la recuperación del calor y un sistema de calefacción en planta.
Todo el edificio cuenta con iluminación LED. Una buena ventilación continuada garantiza una calidad óptima del aire fresco en su interior.
Junto al edificio los empleados disponen de un total de 26 nuevas plazas de aparcamiento para vehículos eléctricos con estación de recarga. Un jardín interior, una cubierta vegetal en la azotea y la vegetación de la fachada norte le confieren un aspecto verde al tiempo que contribuyen a la biodiversidad.
A fin de poder controlar y supervisar diversas cuestiones ambientales y su impacto, todas las sociedades de la sede de Mainz han identificado, analizado y evaluado los aspectos ambientales directos e indirectos de sus procesos. Esta evaluación aporta información sobre la relevancia de los aspectos ambientales en la sede y constituye la base para la definición de objetivos ambientales.
Para poder adaptarse a los continuos cambios de las condiciones marco, la evaluación de los aspectos ambientales se actualiza periódicamente, tras lo cual es posible que haya que llevar a cabo las medidas oportunas.
Entre las cuestiones más relevantes de esta evaluación destacan el consumo energético del parque móvil, la logística de productos acabados, la concienciación del personal y el impacto causado por los productos. A este respecto podemos hacer las siguientes afirmaciones:
Logística de productos acabados
En sintonía con nuestra filosofía seleccionamos a los proveedores según su orientación sostenible. Para nuestros socios de logística más importantes la sostenibilidad también es clave en sus decisiones empresariales. Gracias al uso de vehículos más modernos desde 2008 y una gestión adecuada de la flota se logró reducir considerablemente las emisiones de CO2 por tonelada- kilómetro (-40,2 % entre 2008 y 2018). En este período el porcentaje de vehículos menos contaminantes utilizados pasó del 21 al 94 %.
Parque móvil
Al alcanzar un vehículo de la flota de las empresas distribuidoras los 150.000 kilómetros es reemplazado por otro con todas las prestaciones actuales. Para ello seleccionamos los vehículos menos contaminantes y que producen menos emisiones de CO2 en comparación con los modelos convencionales. Además, realizamos un control periódico del consumo de combustible de los vehículos para poder reaccionar enseguida en caso de que este experimente grandes variaciones.
La moderna central de agua de la planta de Mainz bombea agua de un pozo de 70 metros de profundidad propiedad de la empresa. El agua del pozo se utiliza para la refrigeración y la calefacción de la sede central por medio de la energía geotérmica. A continuación, el agua se trata mediante un proceso de ósmosis inversa respetuoso con el medio ambiente.
Es un proceso físico-técnico en el cual, a cada vuelta de unos 12.000 litros por hora por planta, el agua es presionada a través de una membrana, en la que se quedan adheridas las sales. Utilizamos esta agua desalinizada de alto valor como materia prima para nuestros productos y para los procesos de limpieza y lavado en la producción.
Las aguas residuales que se generan en la producción también se tratan en una planta especial para separar los minerales presentes. El lodo filtrado resultante se utiliza como suplemento en ladrillos de poroton: un auténtico ejemplo de círculo cerrado.